domingo, 29 de agosto de 2010

~ C h a p t e r FIFTEEN ~



- Te amo… - sus palabras parecían música para mis oídos, esa frase es la que mas deseaba escuchar pero ahora de que me sirve si arruino mi confianza hacia el – ella me beso, yo no quise pero me gano la tentación, juro que ella no significa nada en mi vida. Créeme, te lo ruego.
_________________________________________________________________________
- Lo siento – susurre – no puedo perdonarte tan fácil. Adiós justin – le di el ultimo beso lento y suave en su mejilla mientras mis lagrimas caían.
- Male… - el dejo incompleta su frase. Yo lo mire a los ojos posiblemente por ultima vez, di media vuelta y camine junto a mis papas.
- Male ¿estas bien? – pregunto mi papa un poco angustiado.
- Si – trate de parecer estar bien aunque por dentro moría – solo que me despedí de mi… amigo.
- Todo va estar bien hija, tal vez las próximas vacaciones lo veas cuando regresemos – trato de consolarme mi madre. Inútil, nadie puede curar las heridas.
- Si, eso creo – no quise voltear atrás sabiendo el daño que me causaría ver a justin rogarme que me quedara.
No puedo seguir así, es mejor terminar ahora lo que después seria mas difícil concluir. Subimos al avión y por desgracia, o talvez por suerte, mis papas y yo no quedamos en los mismos asientos, ellos estaban a unas tres filas atrás de mí, yo me coloque en mi perspectivo asiento a lado de la ventanilla. Apenas pude estar cómoda y el avión comenzó a moverse, estaba segura que alguien estaba sentado a mi lado, tal vez un chico pero ignore eso y me puse mi iPod a escuchar cualquier estupida canción. Me cubrí el rostro con un suéter que tenia a la mano y comencé a llorar, ya no sentía dolor ahora simplemente parecía no tener sentimientos y donde una vez estuvo mi corazón ahora era un hueco sin fondo. Mire por la ventanilla con los ojos humedecidos despidiéndome de mi aventura, la cual cualquier chica desearía que pasara en su vida. Mi cabeza retumbaba cada vez que recordaba a el hombre que yo amaba envuelto en los besos de otra. Que idiota fui, pero que mas da, ahora otra vida me espera. A partir de hoy será como si nunca hubiera pasado nada, seria como si mi vida siempre fue aburrida y jamás fue invadida por las sonrisas de ese angelical rostro. De tanto lagrimear sin quejidos y en silencio en medio de gente que se encontraba en el avión caí rendida y me dormí.
Me despertó el sonido del alta voz anunciar la llegada a Europa, Francia, me sentía devastada, cansada y destruida. Había llegado a lo que antes rogaba por nunca separarme de justin hoy me pareció una salvación y huir de mis problemas. Baje del avión y aunque la cuidad era hermosa no me parecía algo especial, al contrario había llegado al “país del amor” y yo sin ganas de pensar en ese estupido sentimiento.
********************
Llegamos al hotel y mis padres me dieron una habitación para mi sola, ellos decidieron ir a dar un tour por el lugar mientras yo preferí quedarme en la soledad de mi cuarto. No quería llorar mas y trate de distraer mi mente para no recordar esos sucesos que me llevaron al daño, prendí la TV y no tenia interés en poner un canal en especial, ahora solo importaba hacer cualquier cosa para no pensar, me dirigí a el pequeño congelador que estaba cerca para tomar algo de comer ya que los quejidos de mis intestinos se estaban volviendo molestos, me pare y escuche un corte de noticias en el televisor pero sin prestar interés. Estaba buscando entre la comida pero nada me apetecía, la idea era solo alimentarme por mi bien, tome un sándwich y lo devore, ya no hay problema ahora solo es cuestión de esperar a que mi corazón sane y no habrá mas dolor. Estaba sentada en el suelo, parecía demente sin hacer nada mas que vagar por todo el cuarto hasta que mi pequeño móvil sonó, no iba a contestar hasta que vi era un numero privado, un escalofrió corrió por mi piel de pensar que era justin, no quería atender pero algo dentro de mi sentía que era importante.
- ¿hola? – conteste con un hilo de voz.
- Male ¿eres tu? – esa voz me es conocida, a esta chica la conozco.
- ¿Quién es? – respondí con otra pregunta.
- Soy jasmine – dijo algo temerosa – por favor no vayas a colgar aun - Eso era justo lo que pensaba hacer.
- ¿Qué diablos quieres tu y como conseguiste mi numero? – mi voz se lleno de rencor y tristeza.
- Tengo que confesarte algo… - su voz se apago – es sobre justin.
- ¿Qué pasa con el? ¡quieres encararme que también te acostaste con el! ¡pues hazlo, vete con el! les deseo sean felices…
- ¡NO! – su grito retumbo en mi oído a través del teléfono – el te ama, yo fui quien comenzó todo… el no tiene la culpa de nada, yo sabia que sentía algo por ti pero es que yo también lo quiero y trate de separarlos, pero fue inútil. Créeme, el te ama de verdad.-No mientas, este es otra de sus mentiras solo para que siga ayudándolo, para que el siga ganando fama a costa de mis sentimientos. No, no quiero volver a saber de ninguno de los dos. Adiós.
Corte la llamada y sin poder resistir mas me deje deslizar en la pared hacia abajo. Me rindo, trate de olvidarlo y de no sufrir mas por alguien que no vale la pena pero es que este idiota corazón no entiende de razón, es masoquista y sigue amando a ese chico con fervor, insistente a permanecer sellado en mi mente con sus recuerdos latientes. Es imposible que en tan poco tiempo me hiciera dependiente de sus besos, soy una ingenua en esto del amor. Pero me prometo olvidarlo cueste lo que cueste. Me senté en mi cama y fingí estar bien, preste mas atención a la TV y el programa de escándalo de ultima hora.
-Noticias de ultima hora, el joven cantante Justin Bieber sufrió un accidente automovilístico cerca del aeropuerto en Atlanta. Se dice que planeaba salir del país rumbo a Europa pero nadie a confirmado nada.
El pequeño cuadro con imágenes siguió hablando pero juro que después de esos comentarios a trabes de la pantalla mi cuerpo quedo paralizado. ¡justin acaba de sufrir un accidente! Que hago dios mió ¡que hago! Sentía como mi piel se ponía pálida y mis latidos eran fuertes y constantes, la desesperación me carcomía por dentro viva, estaba del otro lado del mundo mientras el amor de mi vida corría peligro y yo sin poder hacer nada. Me olvide de todo, los problemas, el resentimiento, todo ahora solo importaba su bienestar. Tome mis cosas, mi abrigo y mi teléfono junto con una chequera que por suerte mi padre me había regalado. No me importo dejar a mis papas solos y sin decirles a donde iría, tome un taxi y me dirigí al aeropuerto para tomar un vuelo de vuelta a Atlanta.
No importa los problemas que tendré después, ahora solo tengo pensamientos para justin. Subí al taxi y la lluvia no cesaba pero sin embargo aun había movimiento en las calles, eso hizo que en el camino tardara mas y el coche se quedara atrapado entre el trafico de coches. Quería gritar, llorar, morir. No aguanto un minuto mas
-¿falta mucho para llegar al aeropuerto? – le pregunte al chofer.
-No, pero señorita esta lloviendo y usted no puede irse así – trato de convencerme a que esperara en el auto.
-No puedo, ¡tengo que llegar ya! – abrí la puerta del taxi y la lluvia golpeaba mis cuerpo con fuerza, eran demasiado fuertes las gotas de agua.
Baje y corrí, estaba cerca y podía verlo desde aquí, corrí entre las calles infestadas de autos atascados sin poder moverse en el amontonamiento. Mis piernas estaban acalambradas implorando descanso, pero no, no es momento para eso. Llegue al aeropuerto empapada y con el rostro y mi ropa mojada, me acerque a comprar mi boleto directo a Atlanta.
Por fin lo conseguí a tiempo ya que estaba a punto de partir. Subí al avión, serian horas de nervios y ansias, quería tele transportarme a su lado sin esperar mas, estaba hecha trisas, en el camino las palabras de jasmine retumbaban en mi mente “el te ama de verdad” seria verdad, es posible que ella haya dicho la verdad y el de verdad se inocente, de ser así soy una completa basura al no creerle y perdonarlo, si le pasa algo malo moriré de remordimiento y mi alma se ira con el.
CONTINUARA….

No hay comentarios:

Publicar un comentario