- ¡liam! – la chica que venia con justin, selena, se acerco a liam y lo abrazo. ¿Qué diablos pasa aquí? ¿ellos se conocen. Justin y yo miramos un tanto confundidos.
- ¡selena! Que gusto verte – la saludo amigablemente – mira ella es caroline, vine a cenar con ella.
- Hola caro – la chica de pelo oscuro y tez blanca se acerco a mi y me saludo – un gusto conocer a la chica de la que tanto habla liam - ¿liam le habla de mi a ella? – yo soy la amiga de liam, selena gomez – ese nombre me suena ¡oh si!
- ¿tú eres cantante verdad? – le pregunte sorprendida.
- Si así es – sonrió, era linda la chica y sencilla – les presento a mi novio justin bieber - ¿estamos hablando del mismo chico? ¿mi justin? El me acaba de decir que no son nada. Siento que moriré, caeré, ya no puedo más.
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Justin me miro algo arrepentido, sabia lo que había hecho, mentirme de nuevo, ignore su presencia y volví a mirar a selena.
- ¿justin bieber? – dijo algo atónito liam. El me miro, se había dado cuenta que ese chico de melena rubia que tenia enfrente era el causante de mi depresión. Le lance una mirada para que no hiciera nada, que ignorara la presencia de justin y no cometa una locura. El comprendió.
- Mucho gusto – saludo a liam y aunque el quería matar a justin soporto y fue cortes.
- Bueno nos tenemos que ir – interrumpió liam. El entendía muy bien que quería alejarme de ese lugar ya que yo estaba sujetada fuertemente a su brazo tratando de soportar el dolor de ver a justin.
- No, espera ¿no quieren ir un rato a mi casa? – sonrió selena.
- No gracias talvez después – contesto liam.
- Esta bien pero lo que no aceptare es que no asistan a mi fiesta, mañana cumplo años y será en la piscina, deben llevar traje de baño y esas cosas, y quiero que asistan LOS DOS – hizo una seña de “dos” con los dedos. Eso significa que ¿yo tengo que ir?
- Si, esta bien – note que la voz de liam no era muy convencida. Mire a justin pero este en ningún momento hablo, solo permaneció callado después de la dolorosa confesión de selena. El que calla otorga.
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Llegamos a casa de tía lili, “mi” casa, liam no hablo en el camino, no pregunto nada porque sabía que yo realmente no quería charlar sobre eso, me dolía tan solo pensar en sus besos para que después saber que ya tiene otra chica.
Cuando por fin llegamos a mi casa el me abrió la puerta del coche y baje. Es ahora o nunca, aunque no quiera se que le debo muchas explicaciones a liam.
- lo siento, de verdad no quería ponerte en ese ambiente incomodo – le dije algo nerviosa.
- No me pidas perdón, yo se que tu no tienes la culpa fue tan solo una coincidencia habernos topado con justin, no me gusta verte triste sobre todo ahora que sabes que el esta con selena – se acerco a mi y me arropo en su pecho apretándome con los brazos. Protegiéndome.
- No estoy mal, pero tampoco estoy bien, solo son cosas que algún día ya no sentiré, veras que pronto el único en mi corazón serás tu y justin solo será un recuerdo – espero que mis palabras algún día se cumplan.
- Eso quiero, ser el único – beso mi frente con esa manera tan protectora.
- Sabes… - dije algo confundida - ¿Cómo es que selena no sabe que yo soy la ex de justin? Eso fue todo un escándalo como para que ella misma no se enterara.
- Ella es muy distraída, además estos meses no estuvo aquí, se fue a España y seguro tiene poco de haber regresado, pero… - su voz se hizo seria – no dudes en que tarde o temprano se enterara. Espero que su reacción no sea negativa.
- Eso ya no importa, aun mejor si se entera. Veo que tu y selena son muy amigos – mi voz sonó ¿celosa? Por primera vez estoy celosa por liam. Eso es algo bueno ¿no?
- ¿eh? – soltó una pequeña risita – acaso es que estas… ¿celosa? Porque eso es una buena señal – me sonrió – y a tu pregunta si, si la quiero, pero como amiga, es que ella y yo nos conocemos desde pequeños ya que nuestros padres son amigos desde jóvenes y pues selena es alguien a la que aprecio mucho, es muy sencilla y agradable por eso la quiero tanto.
- Entiendo – fingí una sonrisa. Quisiera que liam se quedara porque se que cuando el se marche el dolor vendrá acompañado de lagrimas, solo cuando el esta a mi lado parece que el sufrimiento no existe.
- Mañana vendré a tu casa para ver una película ¿esta bien? – su voz sonó un tanto agitada y yo se porque. Mañana es la fiesta de una de sus mejores amigas y yo soy lo único que le impide ir.
- ¿y no iras con selena? – mi voz sonó como un reclamo.
- No, tu quieres ir y si tu no vas yo menos – dijo insistente.
- Pero es su cumpleaños, tienes que ir a demás… yo nunca dije que no quería ir.
- Pero ahí estará… - liam apenas iba a pronunciar su nombre, algo que cuando lo escucho el dolor me atraviesa como una punzada en el pecho.
- ¡Eso que importa!, yo estaré contigo y no pienso arruinar nuestra noche solo por el – no se de donde ni como sacare las fuerzas para ver a justin con otra chica pero eso tengo que hacer tengo que verlos juntos para que mi corazón entienda que ya no debo pensar en el.
- ¿estas realmente segura que quieres ir? – liam me miro algo desconfiado con sus lindos ojos verdes.
- Si, solo si me prometes que será algo rápido y que no te despegaras de mi – el asintió con la cabeza y beso mi frente. Amo cuando hace eso.
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Entre a casa después de una larguisima noche y corrí a mi habitación cerré la puerta con llave, me puse mi pijama y me tumbe en la cama.
Como pudo pasar, realmente lo bese, será que el destino de verdad le gusta verme sufrir o porque rayos me hace tantas malas jugadas, la vida es un hipócrita, finge que las cosas mejoraran para después cuando estas bien, cuando realmente ya estas volviendo a ser tu, te da el golpe donde mas duele. En mi caso ese seria justin.
Toque mis labios teniendo aun la sensación de los suyos besándome como antes, lo peor de todo es que yo lo permití, fui débil y caí en su trampa, el me mintió, me dijo que no había nadie en su vida ¡pero si lo hay!
CONTINUARA....
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