-¿aceptas ser mi novia… de verdad? – el me clavo su mirada y con esa irresistible sonrisa sentia derretirmeNo puedo decirle que no, no podria alejarme de el, no ahora que me a dicho tantas palabras lindas que espero sean verdad.
-No puedo decir que no – sonrei, era mas la felicidad que el miedo en este momento.
-¿de verdad? – me abrazo y me beso, podria besarme todo el dia y jamas me artaria de eso. Fue un rose de labios corto pero este tenia mas significado, era dulce y tierno. Estabamos disfrutando el momento cuando llego jasmine.
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-Perdón, interrumpo – tosió falsamente. Claro que interrumpe, acaso no ve. Un momento, ¿ella que hace aquí?.
-Jasmine… - dijo Justin - ¿Qué haces tu aquí?.
-Nada, le pregunte a usher donde ibas y el me dijo, vine porque quería estar un rato a sola contigo – idiota. No ve que Justin está conmigo.
-No. – Contesto Justin fríamente – estoy con Male, mi novia. – me encanto oír esas palabras y ver el cambio drástico de su rostro.
-Esta bien, mejor me voy en la limosina regreso a casa – se nota lo mucho que se molesto.
-No crees que deberías ir con ella – sugerí.
-¿Estas loca?, prefiero quedarme contigo, seria un tonto si desaprovechara este momento de poder comerte a besos – reí. Bueno que espera, que cumpla su amenaza y yo soportare la “tortura”.
-Mejor vámonos, es de noche y estamos solos aquí. Es peligroso.
-Si vámonos – afirmo el.
Llegamos a mi casa en su auto, y más que obvio me dejo en mi puerta y se despidió con un último rose de labios del dia. Entre a casa con una sonrisa de oreja a oreja, como poder tener otro humor que no sea felicidad si mi mayor deseo se había cumplido. Estar con Justin. Esperare ansiosa que amanezca solo para verlo, ahora que ya es mío no dejare pasar ni un segundo sin abrazarlo y mostrar el amor que le tengo. Nos despedimos y él se fue, cuando entre a casa le avise a mi madre que ya había llegado y ella siguió durmiendo como todas las demás en la casa, llegue a mi habitación y me puse mi pijama para tirarme a la cama y descansar, algo que me resulto difícil ya que solo quería pensar en mi y en Justin. Juntos por fin. Mañana será un día nuevo, algo realmente nuevo y no quiero esperar más. Me quede dormida de tanto pensar e imaginar. A la mañana siguiente mi humor era del mejor, me duche me vestí y baje a desayunar con la tía lili, vanesa y mi madre. Todas me miraron algo confundidas por mi des bordadora sonrisa.
-buenos días – dijo mi mama con el seño fruncido. Llena de dudas - ¿Por qué tan feliz?
-Por que… - estuve a punto de aflojar la lengua y decirle de mi nuevo romance, pero no tengo que esperar al momento indicado – nada solo que me siento alegre – sonreí.
-Si, claro – dijo sarcástica.
Pase la mañana esperando a que Justin me llamara y cuando el teléfono sonó volé a contestar con la ilusión de oír su voz atreves de la bocina.
-¿hola? – dije tomando el teléfono y colocándolo en mi oído.
-Hola linda – era Justin en definitivo. Hasta escuchar a su voz me erizaba la piel.
-¿Donde estas? – pregunte.
-En camino para tu casa, quiero que te alistes muy elegante porque en una hora pasare por ti para ir a cenar con mi mama ¿quieres?.
-Pero… ¿con tu familia? Tu mama está de acuerdo – dije nerviosa.
-Si, ella quiere conocerte – me sentía rara. Apenas paso un día y ya conoceré a su madre. Algo raro. También me sorprende como nuestros sentimientos se aclararon y todo cambio, hasta su forma de tratarme.
-Este bien, aquí te espero.
-Ok nena, nos vemos. Adiós.
-Adiós – colgué el teléfono y corrí a avisarle a mi mama, ella no se opuso pensando que todo es parte del teatro de el noviazgo de Justin & yo, ella piensa que no somos nada asi que no tuvo inconveniente. Salí de ducharme y no me di cuenta que no tenia que ponerme asi que vanesa me ofrecio su ayuda y me presto un lindo conjunto. Me alacie el esponje un poco el pelo, pero si exagerar, me maquille solo puse un poco de rubor en mi mejillas y un poco de colorete para que mis labios se vieran un poco rojos y me vesti
cuando ya estaba lista baje y tocaron la puerta, solo podia ser una persona. Abri y justin estaba tan irresistible como todo el tiempo El llego y abrí la puerta.
-Hola – dije timida.
-Que linda te vez – se acerco y me beso sin pleno aviso – vámonos seguro mi mama nos esta esperando en el restaurant.
-Si – nos acercamos a su Ferrari negro, subimos y emprendimos camino. Cuando íbamos en el camino reíamos, jugábamos, era obvio que no me canso de decir que es el amor de mi vida.
-Sabes… - dijo Justin con esa hermosa sonrisa en su rostro y siguió manejando – eres demasiado linda, podría mirarte todo el día y no me cansaría de eso.
-Justin, eres demasiado especial para mí, te amo – sentía como nuestros ojos brillaban con ese resplandor de amor. Aunque si lo pienso bien, el no me ha dicho un “te amo” , pero yo are que me lo diga. Llegamos y él me abrió la puerta del coche, como siempre habia miles de paparaziz obviamente me resultaba incomodo y me ponía nerviosa pero Justin tomo mi mano y enredo sus dedos con los míos, esta vez si es real. Entramos al restaurant y nos guiaron hasta nuestra mesa, era muy elegante el lugar y muy lujoso. Nos sentamos y por lo visto aun no llegaba su familia, estaba demasiado nerviosa, que tal si ella no me acepta, que tal si no nos llevamos bien y le dice a Justin que se aleje de mi. No, tengo que dejar de pensar en eso y comportarme lo mejor posible, haré lo que todo lo posible porque las cosas salgan bien y podamos estar juntos. Cuando estábamos quietos en la mesa y creo que justin estaba nervioso, se veia tan inocente cuando esta asustado, llegaron la madre de justin, pattie, nos levantamos y ella muy amablemente nos saludo a ambos.
-¿Cómo estas justin? Espero que te estes portando bien – bromeo pattie. Y se sento en la mesa al igual que nosotros.
-Que tal señora mallete – sonrei nerviosa.
-Hola, Male – ella me devolvio la sonrisa. Parece que si sabe mi nombre – tu eres esa chica de la que justin me hablo, ademas de verte en la TV
-Si, creo – los nervios me carcomían, no quiero hacer algo ridiculo.
-Mama, ella es… mi novia. – justin sonrio y se miraron mutuamente como si no hiciera falta palabras.
-Lose – dijo ella – es muy linda – me miro y despues volvio a sonreir.
-justin quiero que la cuides bien y espero que esto vaya en buen camino – eso significa que le agrado ¿cierto?. Las horas pasaron y pattie era muy linda mujer, amable y sobre todo mantiene a justin con los pies sobre la tierra, ella es una mujer muy valiente y fuerte, me sorprende su carácter. Cenamos, platicamos y reimos, al parecer mis nervios y los de justin se esfumaron cada vez mas, llego la hora de irnos y pattie se fue en el auto mientras justin me llevo a casa. Cuando llegamos lo invite a pasar.
-¡ya llegue mama! – grite en cuanto cruze la puerta, era de noche y se supone que ellas estarian aquí - ¿hay alguien aquí? – volvi a hablar - Creo que no hay nadie en casa – le dije a justin.-¿y donde estan? – pregunto el.
-No lose, mira aquí hay una nota – lo tome y lei en voz alta – Male, tu tia y yo llegaremos tarde y vanesa no dormira en casa, asi que no nos esperes, besos mama. No estan – asegure
-Bueno… - dijo un poco extraño.
-¿Qué pasa?
-No nada. – sonrio. lo mire confundida y el se acerco a mi con una sonrisa tentadora, me tomo por la cintura y me beso sin previo aviso, obviamente no lo iba a separar de mi asi que continue su juego, comence a morder sus labios y el no dejaba de soberear los mios, el beso siguio y algo que comenzo como un juego se convirtio en algo mas intimo y algo que llego a otro nivel donde las caricias no cesaban y llegabamos al limite de lo permitido, no, no pienso entregarme a el, no tan pronto aun no estoy lista pero eso no significa que no disfrutare el momento. El acariciaba mis piernas asta el punto de casi meter sus manos a mi falda, yo acariciaba y alborotaba su cabello constantemente, sentia que cada vez que tocaba mi piel esta ardia en llamas sin querer que sus manos pararan, el se se balanceo y con un movimiento me recosto en el sofa y el se dejo puso sobre mi cuidadosamente sin dejar de besarme, estaba disfrutando cada segundo cerca de el, seguir besandolo asta llegar al borde de quedarme sin aire y parar solo unos segundos para tomar bocanadas grandes de aire y continuar.
El dejo de saborear mi boca para seguir con mi cuello y morder mi clavicula, algo que exitaba mas mis sentidos, el corazon me latia fuerte y mi sangre ardia dentro de mi cuerpo mientras mi cabeza dejaba a un lado sus pensamientos para concentrarse en ese hermoso chico de melena rubia y ojos cautivadores que me alteraba con tan solo su presencia. El placer era nuestro unico testigo en la casa solitaria, tan tranquila y serena la noche perfecta para un amorío, pero no, esta nohe no sera. Justin dejo de besar mi cuello y de nuevo volvio a mis labios para hacer presion y seguir besandolo sin descansar, el parecia algo atrevido y con ansias de mas, pero sabia que yo no estoy lista. Me miro y mordio su labio inferior, yo lo tome del cuello de su chaqeta negra de cuero y de nuevo aferre mi boca con la suya para dejar que nuestras lenguas jugaran, el seguia acariciando mis piernas y yo no soltaba su cuello asta que alguien se escuchaba hacercarse a la puerta para introducirse a la casa, ambos nos quedamos helados y a mi me mataba el miedo de que mi madre nos encontrara de esta forma...
CONTINUARA….
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